Como se te ha indicado en múltiples ocasiones las probabilidades de que poseas algo maligno son extremadamente bajas, más aún ya habiendo sido valorada por un médico, si aún no tienes tratamiento para el prurito anal puedes acudir nuevamente al médico para recibirlo y confiar en las indicaciones y diagnóstico dado por él. La gran mayoría de los síntomas que refieres muy probablemente estén asociados a problemas psiquiátricos que ameritan manejo profesional.