Pudiera ser normal, ya que luego de una cirugía de extracción de la vesícula, la digestión se hace más lenta y peor y se tiene dificultad para digerir normalmente los alimentos grasos y algunas proteínas, sin embargo en su caso sería aconsejable acudir a una valoración médica de control con el especialista que lo operó y manifestarle sus síntomas