Las infecciones urinarias ocurren por un crecimiento de microorganismos, en su mayoría bacterias a cualquier nivel de las vías urinarias que genera una respuesta inflamatoria por parte del organismo, generando los síntomas de la misma. Puede estar facilitadas por condiciones que anatómicas como en el caso de las mujeres y la uretra corta, higiene u otras situaciones que faciliten el desplazamiento de gérmenes como el estreñimiento o la actividad sexual.