La artritis es la inflación de una articulación. Dentro de las posibilidades diagnósticas existen causas agudas como las artritis infecciosas o sépticas, las cuales requieren un manejo específico para la mejoría del cuadro de forma completa.
Existen las artritis crónicas como la artritis degenerativa, artritis reumatoide, entre otras, que son patologías de control y que según el grado y el compromiso tienen diferentes medicamentos para su manejo.
Los cambios en el estilo de vida son importantes como parte importante del control de esta patología: realizar actividad física de bajo impacto, ejercicios de flexibilidad, llevar una dieta rica en vegetales y frutas, evitar el alcohol y el tabaquismo, mantener un peso adecuado (el sobrepeso empeora los dolores articulares), evitar las posturas prolongadas en un mismo sitio y el control del estrés.