Existen diferentes patologías que puedes causar este tipo de lesiones y solo una valoración médica presencial puede determinar la causa de estas lesiones. Las causas más comunes serían: Obstrucción de glándulas sebáceas, condilomatosis, reacción alérgica, herpes, entre otras. Lo ideal es que un médico pudiera valorarte e indicar tratamiento en caso de ser necesario.