Este remanente que nos refriere es básicamente como una "piel" en la que se encontraba una vena hemorroidal que se prolapsó (salió). Una vez esta vuelve a su lugar, los remanentes pueden persistir sin que quiera decir que tiene la enfermedad activa. Continúe el manejo tal cual lo viene haciendo. Si no hay dolor, sagrado u otro síntoma no hay otra indicación diferente que continuar con sus controles médicos periódicos.