Los forúnculos se asocian a una obstrucción de las glándulas sebáceas y el sobrecrecimiento bacteriano, especialmente de gérmenes como el Staphylococcus. La aparición en zonas como los muslos y glúteos se asocia a que se tratan de zonas de roce o presión donde se facilita la obstrucción de dichos poros.
Puede mantener un adecuado aseo del área y exfoliarla periódicamente. De acuerdo a la frecuencia de aparición de este tipo de lesiones, se puede sospechar la presencia de colonización que podrá requerir tratamiento.