Básicamente al llegar al hospital lo primero que harán es examinarte el pabellón auricular para ver de dónde proviene el hematoma y cómo o con qué lo van a drenar sin alterar las estructuras de tu oído. Una vez hayan determinado la vía en la que van a drenar el hematoma suelen poner anestesia regional para que no te vaya a doler y listo. Luego observan el sangrado tras la aspiración y qué tanto se logró disminuir. Te dan recomendaciones de cuidado y de seguimiento. En algunos casos te dejan en observación una horas para evaluar que todo esté bien en otros lados el alta es más rápida.