Debes permanecer calmada. Siempre, antes de cualquier procedimiento quirúrgico los médicos nos aseguramos que tus condiciones de salud son óptimas para llevarte a un procedimiento quirúrgico. Todas las cirugías y todos los procedimientos invasivos pueden tener complicaciones que seguro te van a explicar previo al procedimiento, lo frecuente es que no ocurran pero estarás informada de cada uno de ellos antes de entrar al quirófano. Por tu edad es probable que no tengas comorbilidades importantes que requieran una vigilancia o un manejo especial para darte este tipo de anestesia. Frecuente es que una vez termine el procedimiento, te quedes en la sala de recuperación para que vigilen hasta que nuevamente tu cuerpo esté completamente funcional y no anestesiado. Una de las complicaciones frecuentes en raquídeas es la cefalea postpunción ( dolor de cabeza al pararte que mejora al acostarte, generado por un cambio en las presiones secundarias a la anestesia). No es muy frecuente pero puede ocurrir. Entre otros efectos secundarios encuentras alergia al medicamento suministrado, sangrado alrededor del sitio de la punción, dificultad para orinar mientras pasa el efecto, hipotensión, infecciones, alteraciones neurológicas o convulsiones. Nuevamente, no debes preocuparte, el equipo que trabajará en tu cirugía es un equipo médico entrenado y si la cirugía es ambulatoria es probable que el procedimiento no sea muy grande.