Si bien algunos estudios en animales no demuestran un efecto carcinogénico o mutagénico importante en el alprazolam. Su uso en el embarazo se encuentra restringido por el riesgo de malformaciones asociados a fármacos similares y posiblemente asociado a este también durante el primer trimestre. Debe suspender la medicación y asistir a control médico pronto al igual que control con psiquiatría para evaluar otras posibilidades de manejo durante la gestación.