La frecuencia cardíaca elevada -en este caso- es debida a la infección (amigdalitis y otitis) que le diagnosticaron. Las infecciones generan respuesta inflamatoria en el organismo y esto genera la elevación de la frecuencia cardíaca. La Azitromicina puede tener como efecto adverso alteraciones en el ritmo cardíaco, por lo que su uso en Pediatría y en adultos mayores debe ser prudente.