La respuesta es depende de qué genere la hipertensión pulmonar. Esto ocurre porque hay un sinfín de enfermedades que pueden generar o llegar a producir la hipertensión pulmonar y esta es una consecuencia de las mismas, más que una enfermedad o una entidad patológica solitaria.
Existe una serie de enfermedades hereditarias que si podrían llevar a la persona a desarrollar una hipertensión pulmonar severa como ocurre en la fibrosis quística, en las cardiopatías congénitas, etc.
Sin embargo, también hay un espectro de patologías que son adquiridas a lo largo de tu vida que también pueden generar esta hipertensión. Esto por ejemplo, ocurre en patología por exposición a químicos, personas con obesidad que no se cuidaron y terminan por hacer infartos, hipertensión arterial o enfermedades coronarias; personas que fuman, que tienen EPOC, etc.
Por esta razón la respuesta es que debes tener en cuenta qué está generando la hipertensión para definir si hay o no un patrón hereditario.