Los bebés y los niños pequeños se irritan muy fácil porque no saben cómo expresar lo que sienten. Cuando están más irritables y con cambios en el comportamiento, puede ser una indicación inicial de enfermedades como gripas pasajeras, dolor por la salida de los dientes, etc. Ellos también registran cambios en el comportamiento cuando hay una modificación en sus vidas: estar casi todo el día con una niñera extraña, cambio de la habitación, no ver casi a la mamá porque trabaja, etc. Aproveche las consultas de crecimiento y desarrollo para que le expliquen sobre el comportamiento y desarrollo de los niños y lo guien para que pueda ayudar a su bebé.