Los factores de transferencia se refieren a moléculas con capacidad inmunológica extraídas de animales o humanos, consumidas con una potencial de activador del sistema inmune (sistema de defensas).
Sin embargo, no existe evidencia suficiente para sugerir su uso ni efectividad. En el momento la evidencia es limitada respecto a la prevención de distintas condiciones, entre ellas el cáncer. Pero es claro que no actúan como tratamiento del mismo. Es empleado de forma controlada en algunos grupos de pacientes, para la prevención de algunas infecciones virales.
Si existen antecedentes familiares de cáncer, es importante el control o tamizaje temprano. Por lo demás, mantener un estilo de vida saludable con una dieta balanceada sin excesos y ejercicio, es una buena herramienta de prevención, no solo del cáncer sino también otras enfermedades.