No hay un método objetivo por el que usted pueda decir con certeza que funcionó o que no funcionó. En general la tasa de fallo es baja y si hay un sangrado posterior se asume que funcionó. Si usted no sangró no significa que no haya funcionado sino que no se presentó ese efecto adverso. Recuerde que es un método de planificación de emergencia y no debe ser usado de manera frecuente.