Un trastorno de ansiedad y depresión puede generar una gama impresionante de síntomas como forma de somatizar el sufrimiento psíquico. Determinar si los síntomas que usted tiene son secundarios a su enfermedad implica que sea valorado directamente, pues existen enfermedades que podrían generar los pitidos (tinnitus), el dolor de cabeza y la sensación de calor en cara. También existe la posibilidad de que sean efectos adversos de los medicamentos.
Si los síntomas que presenta son insoportables, constantes y persistentes debe consultar al médico para poder valorarlo y decidir si es necesaria una valoración por el médico otorrino o neurólogo o si son secundarios a su trastorno psiquiátrico.