El Sildenafil no presenta un amplio grado de toxicidad hepática, no obstante puede poseerlo al contar con metabolismo a nivel del hígado. Dentro de sus posibles efectos adversos no usuales se encuentra la elevación de las enzimas hepáticas.
El uso en pacientes con antecedentes de enfermedad hepática debe realizarse con precaución, por el aumento de su disponibilidad al reducirse su metabolismo.