Lo primero que hay que hacer es un urocultivo que descarte la presencia de infección urinaria, y de ser así identificar qué tipo de bacteria es la causante y los antibióticos sensibles.
No está de más consultar al ginecólogo para que se descarte una enfermedad pélvica inflamatoria (infección en sus órganos femeninos internos), ya que esta ocasiona dolor al tener relaciones y genera infecciones urinarias.