Algunos bebés pueden tener más flatulencias que otros sin necesariamente ser algo patológico. Si su bebé no presenta llanto inconsolable, no se coge el abdomen, no hay cambios en las deposiciones u orina, no presenta vómito... no debe preocuparse y debe continuar dando la leche materna de manera exclusiva hasta los 6 meses de vida. Además de continuar sus controles normales de crecimiento y desarrollo.