El asunto no es decir que tal vez eran cálculos, el asunto es comprobar mediante estudios si hay cálculos o no; porque si no son cálculos renales hay que estudiar el estado de su columna vertebral especialmente en la región lumbar, el estado de su musculatura de la espalda, posturas, su peso, su condición físico-atlética, etc. Así que regrese al médico y pídale un estudio completo y aclaración sobre su dolor.