Puede ser que la masturbación se haya convertido para él en un hábito compulsivo que le representa placer. La masturbación no es algo malo, pero sí puede llegar a convertirse en una práctica obsesiva compulsiva. Se aconseja tener una charla en pareja para aclarar este tipo de cosas, qué es lo que los satisface a la hora de tener relaciones sexuales.