Al incorporarnos a la posición de bipedestación (de pie), en especial luego de permanecer acostados por mucho tiempo, el corazón tarda unas fracciones de segundo en ajustar la fuerza para que la sangre llegue hasta la cabeza (debido a la gravedad). Por esta razón podemos experimentar mareos cuando nos levantamos rápido de la cama.
Mi recomendación es que inicialmente se siente despacio en el borde y luego de 30 segundo se ponga de pie para evitar este síntoma.