Estos cambios no son específicos de infección por Clamidia. De hecho, considerando que aparecen exclusivamente al finalizar la relación sexual, es posible que se trate de irritación secundaria a la fricción por la actividad sexual.
En este caso puede ayudarse favoreciendo la lubricación mediante el juego previo o complementar con el uso de lubricantes a base de agua. Es recomendable que mantenga un aseo genital diario con abundante agua, retrayendo el prepucio para limpiar la cabeza del pene. Si las molestias persisten, sería aconsejable que acuda a control médico para descartar otras causas.