La hormona del embarazo (Gonadotropina Coriónica Humana) se empieza a producir cuando el óvulo es fecundado y su nivel prácticamente se duplica cada 3 días. Su máxima cifra se alcanza al final del segundo mes.
Los exámenes en sangre pueden ser cuantitativos (nos dirán la cantidad de hormona) o cualitativos (nos dirán si la prueba de embarazo es positiva o negativa)... por lo que son estos últimos los que se indican para corroborar el diagnóstico.
Para que la cantidad de hormona pueda ser detectada, se requiere que hayan pasado de 8 a 10 días aproximadamente después de la concepción (cuando se une el óvulo con el espermatozoide). Si el examen se hiciera antes, a pesar de haber un embarazo y una pequeña cantidad de hormona, esta no sería detectada por la prueba por lo que "fallaría" como medio para corroborar el diagnóstico.
Usualmente puede ser detectada después de 10 días de la concepción y su nivel se duplica prácticamente cada 3 días durante los primeros 2 meses.