La varicela no contraindica de forma directa la lactancia, sin embargo al ser una enfermedad altamente contagiosa el contacto directo con el menor se asocia a un elevado riesgo de contagio.
La varicela podrá ser contagiosa desde antes de la aparición de las lesiones y durante la curación de estas, por lo que el bebé puede encontrarse infectado no justificando la separación de la madre en un lactante por lo demás sano sin condiciones o enfermedades previas.
De acuerdo a la edad de su bebé y el estado de la infección se podrá sugerir algún grado de distancia. Asista a valoración médica para evaluación de las lesiones.