El riesgo es bajo dado que las vacunas se desarrollan con virus atenuado o fragmentos de virus que no general infección.
Se puede presentar sintomatología infecciosa y el manejo es con medicamentos para control de síntomas como analgésicos e hidratación. En caso de presentar fiebre que no mejora, dificultad para respirar, sensación de ahogo se debe consultar al médico.