Es posible que desaparezcan solas. Muchas veces incluso ni siquiera hay patología del globo ocular como tal ni se asocian a alguna otra patología: así como aparecen pueden desaparecer.
El inconveniente es que no se sabe el tiempo de evolución. Si al examen físico por el oftalmólogo no hay alteraciones, entonces no hay de qué preocuparse.