De acuerdo al origen de los cálculos pueden emplearse estrategias adicionales en su tratamiento. De forma general, mantener una adecuada hidratación incrementado la ingesta diaria de líquidos para favorecer el flujo a nivel renal y evitar la sedimentación y formación de nuevos cálculos o crecimiento de los ya existentes... contribuyendo a la expulsión o disolución lenta de los mismos.