Los exámenes de orina, específicamente el uroanálisis, tiene indicación en infección urinaria. Además de ser una herramienta para sospechar cálculos renales, para diagnosticar hematuria microscópica, también sirven como herramienta de control cardiovascular para identificar la eliminación de proteínas por la orina.
Otros análisis pueden medir electrolitos en orina y hormonas que tienen eliminación -por ejemplo cortisol o catecolaminas- y hacer cultivos de la orina en búsqueda de microorganismos patógenos.