Totalmente cierto. El reflujo gástrico, al ascender, irrita la laringe y la faringe produciendo sabor metálico en la boca, disfonía, tos seca, etc.
Todo esto es por el mecanismo de irritación local.
Si esta presentando estos inconvenientes, le recomendaría consultar al médico tratante para obtener una historia clínica completa y considerar si requiere exámenes o tratamientos adicionales.