Sí. A pesar de que el Losartán es por lo general bien tolerado, hay una pequeña cantidad de pacientes que pueden cursar con efectos secundarios como el incremento en la acidez gástrica y derivar en gastritis.
Si observa este tipo de efectos, le recomiendo comentarlo con su médico para valorar un tratamiento de reemplazo o acompañarlo de protectores gástricos. Por lo pronto, podría evitar consumirlo en ayunas.