La vitamina E y C están descritas como medicamento que ayuda a estabilizar las respuesta inmunológica, mejorando las defensas y disminuyendo el estrés oxidativo. La vitamina E -según los estudios de revisión- no tiene beneficio para el consumo sin existir contraindicación para tomarse durante el embarazo. Recomiendo consultar al médico tratante para establecer la necesidad de continuar con el tratamiento y explicar el objetivo del mismo.