Los síntomas más comunes son, el hambre y la sed en exceso, orinadera, visión borrosa, fatiga, heridas que no sanan fácilmente, pérdida de peso, cosquilleo en manos o pies. Si tienes algunos de estos síntomas o dudas sobre la posibilidad de tener diabetes, consulta a un médico para realizar una sencilla prueba de azúcar en sangre.