Existen múltiples causas para bajarse la presión: desde alteraciones cardíacas hasta alteraciones metabólicas (trastorno de sodio y potasio, deshidratación, calor, etc). También es importante valorar los medicamentos que está recibiendo porque muchas veces dosis sin ajustes de anti-hipertensivos pueden generan hipotensión.
Por lo anterior recomiendo consultar al médico tratante para establecer diagnósticos diferenciales y estudios complementarios.