Un dolor en esta localización tiene múltiples causas: puede corresponder a dolor articular en la cadera, dolor muscular, compresión nerviosa, cálculos renales, lesiones intestinales, hernia estrangulada, entre otras.
Si el dolor persiste, se asocia a fiebre, sangrado, dolor al orinar o limitación a la movilidad acuda de inmediato a valoración médica.