La enfermedad de Parkinson, o temblor agitante, debe ser vista necesariamente por el médico neurólogo para que este considere el tratamiento. Dependerá del grado de avance de la enfermedad para determinar qué tipo de medicamento y en qué dosis debe ser recibido por parte del paciente. Además de algo muy importante: el control del paciente luego de instaurado el tratamiento, ya que dependerán de este control los ajustes al medicamento y el buen control de la enfermedad.