No hay un tiempo definido de recuperación, sobre todo para las patologías neurológicas. El que haya sido un microinfarto es buena señal ya que se demora menos que los infartos grandes.
Podemos estar hablando de días hasta semanas, incluso algunos meses. El paso más importante a seguir es hacer la terapia física de manera muy juiciosa para poder tener una recuperación mayor, ojalá con la supervisión de la terapeuta física.