La menstruación se puede retrasar por múltiples razones fisiológicas (normales) como cambios en el patrón de sueño, en el peso, en la alimentación, el estrés, haber sufrido alguna enfermedad recientemente, etc. Si tu menstruación se retrasa más de tres meses se le llama amenorrea secundaria y debe estudiarse ya que probablemente se debe a alguna alteración ginecológica o endocrinológica.
Si has tenido relaciones sexuales sin protección, es recomendable que realices una prueba de embarazo para descarto. Recuerda que el único método que previene las infecciones de tranmisión sexual es el condón.