Lo primero que se debe tener en cuenta es que este cuadro clínico no corresponde a una urgencia, por lo tanto, la valoración debe hacerse en consulta externa por el ginecólogo tratante. Recordar que después de los 40 años, el cuerpo puede empezar a sufrir cambios correspondientes al climaterio y posterior Menopausia, los cuales se manifiestan principalmente con cambios en las características del sangrado menstrual, como en su color, su frecuencia y en su cantidad.