El grado de sensibilidad en las diferentes partes del cuerpo varía de persona a persona. Si hay antecedente de trauma físico o químico puede deberse a esto. Si es en el ámbito sexual, puede deberse a una estimulación incorrecta o insuficiente. Si definitivamente se continúa la anestesia en esta región del cuerpo, se recomienda una cita presencial para evaluar otras causas.