Si el dolor es súbito, sobre todo si se presentó después de un golpe o caída y se asocia a incapacidad para caminar, sería conveniente que se consultara a un servicio de urgencias para que se realice una radiografía y descartar una fractura; si nada de lo anterior ha ocurrido, puede ser un espasmo muscular que requiere analgesia y en algunos casos relajantes musculares; si la sintomatología persiste, consultar nuevamente al médico.