Este tipo de conductas de rebeldía y agresión, deben ser evaluadas en conjunto con Psicología, cuando exceden al control de los padres en casa. Adicionalmente hablar de forma clara y concisa explicándole lo malo de sus acciones y las consecuencias o peligros que representan para ella o su hermana. Asistir a control con Psicología y continuar seguimiento con pediatría.