Estos síntomas podrían explicarse por actitudes posturales que en ocasiones comprimen las estructuras nerviosas vecinas y generan adormecimiento, parálisis y dolor. Esto en ausencia de otros eventos desencadenantes obvios. Es importante mantener una alimentación balanceada y practicar actividad física regular (mínimo 30 minutos al día) que mejorarán la salud en general y probablemente ayude con los síntomas.