Es habitual que durante la vida, las mujeres tengan alteraciones hormonales que generan cambios en los ciclos menstruales, lo que hará que se presenten retrasos, cambios en las características o la cantidad de menstruación. Ésto se considera algo normal, pero, si no se planifica y no se utiliza condón durante las relaciones sexuales, el riesgo de embarazo existe. Lo ideal es que la prueba de embarazo se haga después de la segunda semana de la conducta de riesgo, que sea una prueba de sangre para evitar falsos negativos.