El tiempo que se recomienda esperar para hacer un test de embarazo en sangre es de 14 días después de la relación sexual de riesgo; los test en sangre podrían detectar el embarazo incluso antes de 14 días, pero para que sea confiable, dado que puede haber variabilidad teniendo en cuenta la regularidad del ciclo, el tiempo de fecundación, entre otros, se recomiendan 14 días.