Puede tratarse de un prolapso genital, generado por laxitud o debilidad del piso pélvico. Se debe consultar con medicina general o ginecología para una valoración presencial y complemento de la historia clínica. Mientras tanto, la realización de ejercicios para el piso pélvico como los ejercicios de Kegel o algunos ejercicios del método pilates contribuirán a fortalecer el piso pélvico.