Diferentes enfermedades pueden producir diarrea como las Gastroenteritis agudas secundarias a infección, la intolerancia a alimentos como la leche, las enfermedades inflamatorias del intestino, etc. Independiente de la causa, siempre es recomendable seguir estas recomendaciones cuando se presente diarrea: Primero, hidratarse de manera adecuada con sales de rehidratación oral (bien sea en sobre para diluir en agua potable o en presentación líquida, como Pedialyte, con una concentración de 60 mEq/L o superior), tomando al menos una taza por cada deposición que se presente. Segundo, continuar alimentándose con alimentos que endurezcan la materia fecal, denominado dieta astringente, ésta contiene alimentos ricos en almidón como arroz blanco, sopa de fideos, papa cocida, galletas de soda y frutas como guayaba, banano, pera. Si los lácteos están aumentado la frecuencia y la cantidad de la diarrea, es recomendable que se suspendan. Tercero, si la diarrea persiste e incapacita, es necesario utilizar medicamentos que la detengan como los que contienen Loperamida. Si la diarrea persiste o está causando síntomas de deshidratación, es indispensable que se acuda al médico.