Hay que evaluar si las interrupciones se asocian a alguna situación, por ejemplo, el deseo de orinar. En términos generales medidas de higiene del sueño pueden contribuir en esta situación: Evitar bebidas negras o con cafeína hasta 2 horas antes de dormir, evitar la televisión en el cuarto o asegurarse de apagarla al dormir, disminuir los estímulos visuales y auditivos (luces y sonidos); si esto último se dificulta, emplear antifaz y tapones que podrían ayudar, evitar la ingesta de líquidos antes de dormir y orinar antes de entrar a la cama, adecuar el ambiente a un espacio de sueño apropiado: Ventilación, cobijas, etc. Algunas de estas recomendaciones podrían contribuir, si los síntomas permanecen se podría solicitar una valoración por psiquiatría o por el médico general para evaluar la necesidad de medicamentos.