La Faringitis es una inflamación de la faringe, éste proceso puede ser infeccioso o no, en el caso de que sea infeccioso puede ser viral o bacteriano. Generalmente cuando es viral, no hay aumento significativo del tamaño de las amígdalas y no hay exudado purulento en ellas, pasa sola y no requiere tratamiento antibiótico, generalmente se acompaña de síntomas de un resfriado común; mientras que en la bacteriana suele haber agrandamiento de las amígdalas, exudado purulento, malestar general, fiebre, dolor muscular y articular. Si se presenta alguno de éstos síntomas, se recomienda que sea valorado por un médico para que determine qué tipo de faringitis se tiene y se indique un tratamiento adecuado.