Es necesario mantenerla hidratada, realizar un aseo nasal constante, controlar factores ambientales como frío, cambios de clima, contaminación, humo, polvo, humedad, puede ser necesario realizar lavados nasales con suero fisiológico con una jeringa por cada fosa nasal, lo cual es incómodo pero ayuda a disminuir la congestión. Si no hay mejoría, presenta fiebre, respiración rápida o con dificultad, es necesario que se consulte de forma presencial.